miércoles, 25 de febrero de 2009

Judíos leyendo diarios nazis


Se encuentran Shloime y Yankel en un bar de Villa Crespo para tomar un tecito y charlar un rato. Cuando llega Yankel, Shloime ya está sentado leyendo el diario

Yankel se horroriza cuando se da cuenta que Shloime está leyendo un diario nazi!

Shloime!!! Pero que te pasa??? No lo puedo creeeerrrr !!! Vos estas loco?? Qué estás leyendo?? Un diario nazi??

Tranquilo Yankel….ya te voy a explicar!!!! Sabes lo que pasa? Cuando leo los diarios paisanos te cuentan….

a.. Que hay problemas en los Shil ( templos) que se fue el Rabino….
b.. Que en los clubes hay problemas…..que la plata no alcanza….
c.. Que se pelean los dirigentes de AMIA con los de DAIA!!!
d.. Que cierran los schules ( escuelas) por falta de alumnos!!!
e.. Que los matrimonios mixtos terminarán con los judíos!!!
f.. Que los piqueteros, los antijudios, quebracho, Iran, etc.etc.etc.

En cambio leo este diario nazi y me hace sentir mucho mejor:
a.. Dice que los judios somos los dueños del mundo….
b.. Dice que Israel es una potencia temible…
c.. Dice que somos el poder invisible detrás de todos los gobiernos de los
paises de Occidente…
d.. Dice que los judios somos los dueños de todos los bancos!!!!

¿Decime Yankel?? Cuál te dá más satisfacciones
Publicado por en

1 comentario:

  1. Anónimo26 de febrero de 2009, 6:18

    Muy bueno el momento de humor. Saber reírse de uno mismo es la virtud de los grandes y la envidia de los pequeños.

    ResponderEliminar

A quienes quieran agregar comentarios les invito a hacerlo de buena fe, en términos correctos y altura intelectual. No discrimino a quienes no piensan como yo.
Tampoco los elogios me harán perder la ecuanimidad.

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom)

ACABO DE LLEGAR.

En realidad siempre estoy llegando.
Y cuando Uds. lleguen me encontrarán aquí, o en otra parte pero cerca.
Nunca me detengo, en realidad siempre estoy yendo.
Detenerse es dejar pasar el tiempo, moverse es despertar el tiempo adormecido.
Al fin y al cabo, adormecerse no está tan mal, pero por esas costumbres repetidas y transmitidas desde que los abuelos eran jóvenes, no hay que quedarse dormido.
Salvo cuando te mandaban a dormir, y uno no quería cerrar los ojos. Vale decir, dormirse no está bien, pero no hay que querer no dormirse.
Esto es lo que hace a la vida incomprensible. Casi todo lo que me gusta y divierte si no está prohibido, al menos está mal visto.

Jorge

Etiquetas